En el recuerdo, no me quedan gracias, lamentos, ni sollozos, todo se ha secado por fin y de una vez. La lamentable peste lame mis neuronas en un acto simple de humanidad...
No hay momentos de angustia, no hay momentos de felicidad, sólo hay un plano, muy plano, lleno del blanco sinfín en el que se deleiten los torpes y los cobardes como yo, a dejarse caer; quisiera simplemente que el vacío no fuera tan largo o poderme deshacer en el trayecto, pues en ocasiones muy seguidas, ya no encuentro que hacer...
Todos lo planes y los sueños se han ido borrando, no del modo paulatino en el que se producen, sino de un modo tajante en el que ya no puedo hacerle un duelo, en el que los lamentos me retienen de irme con ellos. En instantes siento que no estoy hasta que respiro de nuevo... Es como si el cuerpo vagara solo en cautiverio; un indicio de ser, en el que no puede abrir las puertas que lo retienen tan dentro que es imposible discernir si realmente lo que sucede es acción de la compleja maquinaria biomecánica, o en realidad hay un impulso más que cárnico alimentando los deseos de ser... ser si tal cosa existe o puede llevarse a cabo.
Lamento muchas cosas; lamento no haber podido morir en un momento justo; creo que he expirado...
Hola mujer invisible con palabras visiblemente significativas, gracias por la visita, mi instinto me guía al momento de escribir y leer tus frases son una buena enseñanza, muchas gracias!!!!!
ResponderBorrarMucha suerte en tus proyectos sin importar que tan extraños sean..............