viernes, 11 de abril de 2008

Catch the breath III

Este año parecía un silencio no acotado

Y yo simplemente decidí prender el radio...

y realmente, aunque nunca creí que fuera posible, mi piel mutó, y con muy poco equipaje me embarque en un viaje a ninguna parte... y aun no he podido leer el guión, y que más da... no me da miedo ya, seguir dando tumbos por ahí... me he convencido que no tengo nada que perder... lo he perdido todo... y encontrado en los pocos aciertos... toda la felicidad comprimida en un sólo momento, eso pasa cuando se vive, la vie en rose, probablemente sea otra farsa del marketing mediático otro bloddy valentine...

y que es escaso, más que el continuar aquí exponiendo hechos imprescindibles para matar el rato, medio insoportable de los movimientos involuntarios de los que se es esclavo sin pedirlo, desde que de un acto egoísta, empezamos a existir nuevamente en este plano... vida/muerte y el stand by, necesario, para valorar el aliento.

En caso tal que los momentos fueran un resumen, dentro de poco haré el mío... nuevamente puede caerse en el cliché de un 5 que es mi nombre y aun duele en el alma que venga inmediatamente tras un fantasma que se traga las letras del predecesor...

No quisiera parar, pero este es mi engaño...

Creo que ve...

Creo que ve...

Y para vivir un poco menos incómoda podría engañarme y creer que ve...

Como dicen por ahí...

Engáñame un poco al menos...
Enrique Bunbury

o

...aunque sepa que miente

aunque sepa que es falso...

Héroes del Silencio

Probablemente luego me encuentre de nuevo transmitiendo desde la clandestinidad a alguien que se parezca a Kuno Tatewuaki y me diga sin más remedio Cabellos de fuego, aunque no sea verdad...

No hay comentarios.:

Publicar un comentario